Marina

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Marina, de Ezequiel Barranco Moreno

jueves, 27 de agosto de 2015

Decisión fatal

En un momento de desesperación salió con un cuchillo en la mano dispuesta a matar a cualquiera que se le pusiera por delante. Al reflejarse en el espejo del ascensor no tuvo más remedio que suicidarse.

Suicidio, de Luc Tuymans

4 comentarios:

  1. Ojalá todos los asesinos se matasen antes de llevar a la práctica sus ideas delirantes. Leni Lavado

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  2. Quizás su idea delirante era encontrarse consigo mismo.

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  3. Respuestas
    1. Un desesperado valiente y cruel. Otros desesperados se dejan morir.

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