Marina

Marina
Marina, de Ezequiel Barranco Moreno

viernes, 5 de junio de 2015

El ramo

- Mira, sobre la mesa roja del centro del salón, como si lo hubieran dejado caer, hay un hermoso ramo de flores. Míralas bien: esas flores blancas rutilantes, los capullos a punto de abrirse, esas hojas verdes llenas de vida, el olor a jazmín que llena la habitación y embriaga…

- Pero ¿qué dices? Si sólo son cuatro flores marchitas y algunos pétalos secos.


- Bueno, perdona, quizás tengas razón… es que no las estaba mirando.

Flores secas, de Germán Muñoz Gutiérrez

4 comentarios:

  1. Una vez más me hace reflexionar y preguntarme..¿No las estaba mirando, o estaba mirando mas allá, a la belleza que nadie v en el momento más marchito ... a la hermosura que una vez fué?

    Un saludo.

    ozz.

    Pd. Y esta vez sin encadenar.

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    1. "Solo se vi bien con el corazón, lo esencial es invisible a los ojos", nos dejó dicho El Principito.

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  2. Yo vi las flores preciosas del primer observador. Pero tb vi las secas y marchitas que veia el segundo observador. Para mi existen las dos aunq sean las mismas y eso sin mirar, si miro seguro q existen tres.
    Poder humano. Que bien q tenemos un corazon capaz de hacer esa magia!

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