Marina

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Marina, de Ezequiel Barranco Moreno

domingo, 4 de septiembre de 2022

Villa Amadora 1: La ciudad.


Me complace que, poco a poco, vayáis conociendo la ciudad, la casa y los personajes de mi novela Villa Amadora se vayan presentando.

Filas de seminaristas caminaban a la Catedral, en silencio. Ancianas enlutadas arrodilladas ante el Cristo de la Luz musitaban oraciones, en silencio. Cadenas se arrastraban detrás de la Virgen de la Soledad, en silencio. Llantos y golpes en el pecho tras Nuestro Padre Jesús suplicaban, en silencio. El ritmo marcial de la benemérita tras la procesión de los civiles nos aclaraba quien tenía la razón, que debíamos asumir, en silencio. Iglesias llenas en las que solo se oía susurrar alguna oración, en silencio. El rosario de cada noche unía a las familias, en silencio. El obispo Romero levantaba el San Rostro, en silencio, y los devotos rezaban sin atreverse a elevar la mirada, en silencio. Los curas, los militares y los prohombres comían y bebían, reían y festejaban a gritos, y desviaban una mirada inoportuna, en silencio. Bendiciones con saludo romano y la cara al sol prometían un nuevo amanecer en el que no creían, en silencio. Los niños recibían la primera comunión con chocolate, cuando lo había, en silencio. Los fieles asumían ser polvo, en silencio. La cruz del cerro nos miraba, en silencio. El ángelus, la sabatina, el rosario de la aurora, las misas, las vidas de santos, las tres avemarías y el padrenuestro nos aleccionaban, en silencio. Las monjas, los abades y las beatas de la Compañía de María de los Mártires del Purgatorio y el Convento de las Hermanas de la Caridad de Santa Hilaria nos recordaban que el fin de los tiempos estaba por llegar, en silencio. La fe nos recordaba, en silencio, que solo con resignación alcanzaríamos el reino de los cielos. Así, el silencio se enseñoreaba en las mañanas de neblina, las tardes de agobio y las noches de miedo. Y el futuro se presentaba como una promesa sin palabras, que todos escuchábamos, en silencio.

VILLA AMADORA está disponible en librerías, en la editorial (Líberman) o contactando directamente con el autor.

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